Se trata de una enfermedad causada por un hongo del género ‘fusarium’ que afecta a embriones de las siete especies de tortugas marinas
- El estudio alerta sobre la necesidad de controlar esta patología en el diseño de planes conservación de estas especies amenazadas
Las enfermedades emergentes son unas de las principales causas de pérdida de biodiversidad, y su efecto se ve aumentado por la globalización, la dispersión de especies invasoras portadoras de patógenos, y por el cambio climático. Ahora, un estudio internacional liderado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha descrito una nueva enfermedad emergente causada por un hongo que afecta a embriones de tortugas marinas. Los resultados se publican en la revista PLOS Pathogens.
Ejemplar recién eclosionado de tortuga laúd, o baula (Dermochelys coriacea). Esta especie es la mayor de todas las tortugas marinas; alcanza los 2,3 metros y más de 600 kilos. (Foto Keilor Cordero)