La cumbre Nuestro Océano aplaude los avances del tratado negociado por la FAO y recuerdan que todo el mundo debe embarcarse contra la pesca ilegal

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Pesca 23 Septiembre 2016
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Photo: [State Department photo/ Public Domain]
El Secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, con los participantes en la conferencia Nuestro Océano 2016.
Washington, 16 de Septiembre de 2016 - Una conferencia internacional sobre cómo lograr unos océanos saludables y sostenibles ha aplaudido el creciente respaldo a un innovador acuerdo internacional contra la pesca ilegal, que ha sido negociado por la FAO.
 
El Acuerdo sobre medidas del Estado rector del puerto destinadas a prevenir, desalentar y eliminar la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (PSMA, por sus siglas en inglés), es fruto de años de intensas negociaciones, y entró finalmente en vigor el pasado junio.
 
El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, en su intervención en la conferencia Nuestro Océano en Washington, destacó la necesidad de “actuar con valentía” para hacer frente a la creciente amenaza que suponen diversos acontecimientos actuales.
 
Entre ellos los cambios peligrosos en nuestro clima -motivados principalmente por la actividad humana-; las zonas muertas en nuestros océanos -debidas fundamentalmente a la contaminación que originamos en tierra firme-; las prácticas pesqueras no sostenibles; y las zonas marinas no protegidas, donde valiosas especies y ecosistemas enteros están en peligro.
 
Describiéndola como una señal “alentadora” de los gobiernos del mundo, el Secretario de Estado de EEUU, John Kerry, alabó el progreso que supone el PSMA. Mientras que en 2014 solamente 10 países habían ratificado el acuerdo -jurídicamente vinculante-, actualmente ya lo han suscrito más de 60. 
 
Cuando pedimos pescado o marisco en un restaurante, la carta no refleja la cruda realidad: un tercio de las poblaciones de peces del mundo están sobreexplotadas y casi la totalidad restante está siendo explotada al límite, aseguró Kerry a los participantes de la conferencia.
 
Además, la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR) supone a nivel mundial un coste de decenas de miles de millones de dólares al año y, como destacó el Secretario de Estado, estas actividades suelen estar asociadas a “graves violaciones de los derechos humanos”.
 
“Los buques pesqueros que operan al margen de la ley –dijo-… a veces utilizan a trabajadores esclavos para lograr capturas más abundantes y mayores beneficios”.
 
En virtud del PSMA las partes designan puertos específicos para los buques extranjeros, facilitando así los controles. Estos barcos deben solicitar permiso con antelación para entrar en los puertos, y proporcionar información a las autoridades locales, incluyendo la relativa al pescado que llevan a bordo, permitiendo además la inspección –entre otros aspectos- de su libro de registro, las licencias, las artes de pesca y la carga real que transportan.
 
Es importante destacar que el acuerdo insta a los países a denegar la entrada o a inspeccionar los buques implicados en la pesca INDNR, y adoptar las medidas necesarias. Para ello, el PSMA también recoge la obligación de que las partes compartan información a nivel regional y mundial sobre cualquier barco que se sepa realiza actividades de pesca INDNR.
 
El PMSA es aplicable a cualquier uso de un puerto, de forma que los barcos tendrán que cumplir con los requisitos de inspección incluso si solamente están repostando.
 
Al intervenir en la conferencia Nuestro Océano el Director General de FAO, José Graziano da Silva, elogió a los países que han suscrito el tratado, e invitó a los demás a seguir el ejemplo y “embarcarse” en esta iniciativa, añadiendo: “ahora tenemos que centrarnos en asegurar que su implementación sea rigurosa y efectiva”.
 
“De lo contrario”, advirtió, “los buques que pescan de forma poco escrupulosa seguirán encontrando la manera de llegar a puerto e introducir sus capturas ilegales en los mercados”.
 
“No permitamos que ningún Estado del puerto del mundo –dijo- sea conocido como lugar de cobijo para incumplir las leyes frente a nuestros esfuerzos para combatir la pesca ilegal”.
 
En algunos casos los países costeros en desarrollo y los pequeños Estados insulares en desarrollo, que suelen albergar algunas de las zonas pesqueras más atractivas del mundo, tienen dificultades para implementar el PSMA, situación que la FAO pretende corregir.
 
En su discurso ante los participantes en el evento, Graziano da Silva explicó que la FAO ha puesto en marcha un programa mundial para ayudar a los países en la implementación del tratado y sus instrumentos complementarios. Entre ellos se incluyen las Directrices voluntarias para la actuación del Estado del pabellón para combatir la pesca INDNR.
 
Este programa de la FAO se centra en la asistencia normativa, legal y técnica y en la creación de capacidad. Se implementará mediante diversos proyectos nacionales y regionales en colaboración con socios internacionales.
 
Para llevar a cabo esta labor FAO ha conseguido hasta la fecha 5 millones de dólares EEUU, incluyendo fondos propios de la Organización.
 
La FAO colabora además con Google para desarrollar nuevas plataformas y metodologías de investigación que ayuden a los países a mejorar el seguimiento, control y vigilancia de las actividades pesqueras.