La experta del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señaló que los plásticos desechables proliferan a la visita de todos en playas y mares de México y otros países, en especial, después de temporadas vacacionales.

"Su mala gestión provoca que cada año vayan al océano entre cinco y 13 millones de toneladas", refirió la experta en una declaración.

Asimismo, Ruiz Fernández indicó que las fracciones nano (partículas menores a 100 micras) ya están insertándose a nivel intracelular en los peces, así que esa basura que se arroja al mar "nos la vamos a comer de regreso".

El llamado "gran parche de basura del Pacífico" alcanza 79.000 toneladas de plásticos flotando en un área de 1,6 millones de kilómetros cuadrados, de acuerdo con la especialista.

Para revertir esta tendencia, la UNAM coopera en un proyecto internacional auspiciado por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el cual monitorea algunos mares de América Latina y el Caribe, en conjunto con otros 16 países de la región.

"Este esfuerzo internacional está promovido por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, pero el OIEA tiene el mandato de la ONU del uso pacífico de la energía nuclear", dijo Ruiz Fernández.

Uno de los ejes principales de este proyecto es desarrollar capacidades para el monitoreo de microplásticos en el ambiente costero, a partir de la formación de profesionales en técnicas de recolección y muestras ambientales, e interpretación de este tipo de contaminación.

Según cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU) Medio Ambiente, cada año el mundo usa 500.000 millones de bolsas de plástico, y cada año al menos ocho millones de toneladas de plástico terminan en los océanos, el equivalente a la descarga de un camión de basura cada minuto.